Reseña: Los hombres que no amaban a las mujeres,

Título: Los hombres que no amaban a las mujeres. 
Autor: Stieg Larsson
Editorial: Destino
Edición: Noviembre de 2008
Número de páginas: 665
Primer libro de la Trilogía Millenium.

Sinopsis: Harriet Vanger desapareció hace 36 años. A pesar del despliegue policial, no se encontró rastro de la muchacha de 16 años. ¿Se escapó? ¿Fue secuestrada? ¿Asesinada? Nadie lo sabe: el caso está cerrado, los detalles olvidados.

Pero hay quien sigue recordando a Harriet, su tío Henrik Vanger, un empresario retirado, ya en el final de su vida y que vive obsesionado con resolver el misterio antes de morir.
En las paredes de su estudio cuelgan 43 flores secas y enmarcadas. Las primeras 7 fueron regalos de su sobrina. Las otras llegaron puntualmente para su cumpleaños, de forma anónima, desde que Harriet desapareció.

Vanger contrata a Mikael Blomkvist, periodista de investigación y alma de la revista Millennium, una publicación dedicada a sacar a la luz los trapos sucios del mundo de la política y las finanzas. Mikael no está pasando un buen momento: está vigilado y encausado por una querella por difamación y calumnia. Así que acepta el extraño encargo de Vanger de retomar la investigación de la desaparición de su sobrina e intentar tirar de algún cabo suelto.

Un trabajo complicado para el que recibe el regalo inesperado de la ayuda de Lisbeth Salander, una investigadora privada nada usual, incontrolable, socialmente inadaptada, tatuada y llena de piercings, y con extraordinarias e insólitas cualidades como su memoria fotográfica y su destreza informática.

Mi opinión del libro. 
(Advertencia: No he podido reprimir algunos comentarios así que les presento una reseña inusualmente larga)

La trama principal del libro es la desaparición de Harriet Vanger. 
Su tío contrata al periodista Mikael Blomkvist como última esperanza para encontrar al asesino de su hija y hurgar entre la pila de documentos de la investigación con la finalidad de dar con nuevas pistas. Blomkvist ha sido juzgado recientemente por un caso de difamación en la revista Millenium, de la cual es socio junto a Erika Venger. En un intento por aclarar el panorama y resolver el caso, nuestro periodista pide ayuda a Lisbeth Salander, una hábil investigadora de la empresa Milton Security, bastante inestable y con unos cuantos problemas encima. Así se verán envueltos en los secretos y trapos sucios de una familia poderosa y rica mientras tratan de lidiar con sus propias vidas.

El libro es algo engañoso al inicio. Luego de presentar la historia de la desaparición en el prólogo, nos envuelven en un caso de fraudes financieros suecos que me hizo abandonar la lectura por un par de días. Este tema no es lo mío y se hizo algo aburrido cuando se llega ese punto. Por suerte es algo breve y no se lleva más de 20 páginas (entre la 20 y 40 más o menos). Luego de un accidentado comienzo en la lectura ya no pude parar y terminé alterando mis horas de sueño. 

El libro se divide en cuatro grandes partes, las cuales se subdividen en capítulos junto al prólogo y el epílogo. Al pie del inicio de cada parte tenemos una estadística acerca del maltrato hacia las mujeres suecas. La narración es en tercera persona y se va alternando la vida de Mikael Blomkvist con la de Lisbeth Salander, para fundir ambas alrededor de la página 400.

Conocemos numerosos personajes, muchos de ellos pertenecientes a la familia Vanger. Al principio me costó un poco identificarlos a todos, principalmente por sus peculiares nombres suecos. Esto es bastante breve porque los más importantes toman protagonismo y se acaban las confusiones. Lo mismo sucede con los lugares, sin embargo estos son descritos brevemente y no toman protagonismo, pues rápidamente volvemos a la trama.

Entre los personajes más relevantes tenemos a Lisbeth Salander, una veinteañera que esta merced del abogado que le han asignado para la administración de sus finanzas por sus supuestos problemas mentales. Sin embargo, trabaja como investigadora para la empresa Milton Security y tiene unas fantásticas habilidades informáticas y una excelente memoria, aunque eso no le quita lo apática y asocial. Mikael Blomkvist, un periodista existoso con muy buena reputación que se encarga de la investigación, aunque está sumido en problemas por su juicio y no está demasiado convencido de adentrarse en el caso. Ha tenido varias mujeres en su vida, pero hay una que siempre está presente, a la que se refiere como su ocassional lover, Erika Venger, socia junto a él en la revista Millenium. 

También conocemos a varios miembros de la familia Vanger: Henrik, al que le quedan poco años de vida, es el tío de Harriet y está obsesionado con su desaparición, aunque afirma que la asesinaron; Martin, el hermano de Harriet y director ejecutivo del Grupo Vanger; su ermitaño padre Harald y muchos otros que no voy a mencionar.

La narración es sencilla y directa, con descripciones breves y una casi inexistente presencia de recursos literarios. Encontramos muchos giros sorprendentes (para mí no tantos porque me anticipé quién tenían la culpa de su desaparición... Por intuición, creo) y la resolución  del caso no trae consigo cartas bajo la manga ni respuestas al estilo "es increíble y muy poco probable". Todas las respuestas están ocultan en los detalles que nos dan a conocer sobre la investigación.

En conclusión, nos topamos con una novela adictiva que trae consigo un misterio fascinante, relaciones no tan amorosas, abusos y perversiones sexuales, secretos, fraudes financieros y un buen puñado de hombres que no aman a las mujeres.

Sobre el autor: Stieg Larsson (Suecia, 1954 - 2004)

Falleció inesperada y trágicamente de un ataque al corazón, días después de entregar a su editor el tercer volumen de la trilogía Millenium y poco antes de ver publicado el primero. Periodista y reportero de guerra, luchador plenamente comprometido contra todo tipo de violencia, gran lector y entusiasta del género negro y la ciencia ficción.




Tenía la intención de poner un fragmento de la novela, pero esto ya quedó bastante largo. 
Y quité la verificación de palabras en los comentarios, no había reparado en ese detalle.